Los hoteles son los lugares perfectos que tienen la obligación de hacernos sentir que estamos de viaje. Casi siempre acudimos a ellos en vacaciones, comprometiéndolos a que nuestra estadía sea una de las mejores. Por esa razón al aterrizar en la ciudad de Piura, decidimos vivir la experiencia Casa Andina Premium.

Con previa reserva y altas expectativas generadas antes del viaje, nos recibieron en recepción y atendieron con mucha amabilidad en la cuál un relleno de datos y uno que otro trámite por política del hotel, no hemos demorado mas de cinco minutos. (Cuándo estás de vacaciones el tiempo apremia). Instalados en nuestra habitación equipada con todo lo necesario para no extrañar el hogar, un baño precioso, camas muy cómodas con lámparas a cada lado, tv con cable, wifi, aire acondicionado, terraza con mesa y sillas con vista a la piscina, planchador de ropa, secadora de cabello, caja fuerte para tus pertenencias de valor, hervidor eléctrico y algunos comestibles incluyendo el bar. Por supuesto, un teléfono interno en el baño y habitación para cualquier urgencia.

El reloj marcaba las 10.20 de la noche y quizá darnos un salto por el bar fue la mejor idea que pudimos tener desde que llegamos al hotel. El barman nos preparó un trago hecho con algarrobina, pisco y leche; continuamos con un Gin tónic y acompañamos con unos crocantes de patacones rellenos con cebiche. La comida y las bebidas nos dejaron satisfechos. Era la hora de dormir. Al día siguiente, siendo las 7.15 am fuimos a recargar energías al desayuno buffet que ofrece el hotel (entre panes, jugos, huevos revueltos, pollo, embutidos, bebidas calientes, fruta), fue suficiente para reponernos y cargar batería.

Después de un paseo por la ciudad, regresamos y no lo pensamos dos veces para nadar un poco en la piscina hasta la hora del almuerzo en el cual, disfrutamos de un arroz con conchas negras maravilloso y arroz con pato que con cada bocado te hacían recordar que estabas en el norte del País. Probablemente, contarte de una manera resumida no es suficiente para transmitir mi experiencia. Pero, estoy seguro que no te faltarán ganas para visitar el hotel, el cuál nos ha brindado una experiencia con 20 puntos.

Cabe recalcar que la gastronomía del norte es muy variada, los platos se caracterizan por su fuerza en sabores; los mariscos y pescados son los reyes de la carta. Pero, también hay otras opciones que podrías escoger como el cabrito a la norteña, los majados, el sudado, la malarrabia, tamalitos verdes, arroz con pato, etc. A pesar que no he tenido mucho tiempo de disfrutar de la variedad. En el restaurante Plaza, que pertenece al hotel, me brindaron lo necesario para conocer parte de su gastronomía y poder contarlo.

¡Que sigan los viajes!   (Recuerda seguirme en instagram: @explorandosaborespe)